Hierro

 

Acción Terapéutica

Antianémico.
Publicidad

Propiedades

Las sales ferrosas son tres veces mejor absorbidas que las férricas y la diferencia se hace más marcada en las dosificaciones altas. Las variaciones de las distintas sales ferrosas tienen poco efecto sobre la biodisponibilidad; así, sulfato, fumarato, succinato, gluconato y otras sales son absorbidas en iguales proporciones. Debe conocerse la cantidad total de cada preparado y no su masa total. La mayor ventaja del uso parenteral de hierro es la posibilidad de formar con rapidez reservas del elemento que por vía oral tardarían meses en alcanzarse (por ejemplo, en pacientes que recibirán eritropoyetina). El intestino delgado regula la absorción y previene la entrada de gran cantidad de hierro al torrente sanguíneo.

Indicaciones

Anemia ferropénica.

Dosificación

Las dosis deben ser individualizadas, ya que la respuesta de la anemia ferropénica al tratamiento depende de varios factores, entre ellos la causa y gravedad de la anemia, la presencia de otras enfermedades y la capacidad del paciente para tolerar y absorber el hierro medicinal. La respuesta a la terapéutica con hierro se evalúa mediante el índice de producción de reticulocitos y la elevación de la hemoglobina o del hematócrito. No debe tomarse una decisión acerca de la efectividad del tratamiento hasta después de transcurridas 3 a 4 semanas. El empleo profiláctico del hierro oral debe reservarse para pacientes con alto riesgo: embarazadas, pérdida excesiva menstrual, dadores de sangre y lactantes. Dosis terapéutica usual: 200mg/día (2mg a 3mg/kg) en 3 tomas diarias sobre la base del contenido de hierro del preparado. Para prevención: 15mg a 30mg/día. La absorción oral es mejor cuando se ingiere en ayunas. La aplicación parenteral debe reservarse para indicaciones específicas (ver arriba).

Reacciones Adversas

La intolerancia a los preparados orales de hierro es principalmente una función de la cantidad de hierro soluble presente en el tracto gastrointestinal y de factores psicológicos. Pirosis, náuseas, vómitos, malestar gástrico superior, constipación y diarrea. Con dosis altas son más comunes las náuseas y el dolor abdominal. Heces oscuras teñidas por el hierro. Hemocromatosis, sólo en pacientes con trastornos en la absorción de hierro. Luego de la inyección intramuscular pueden ocurrir molestias prolongadas en el sitio de inyección, decoloración de la piel y alteraciones malignas en el sitio de inyección. La sobredosis de hierro es particularmente grave en niños, ya que se requiere atención inmediata si la ingestión ha superado los 30mg/kg. El tratamiento se realiza con deferroxamina.

Precauciones y Advertencias

Debe tenerse especial cuidado en pacientes que puedan desarrollar una sobrecarga de hierro, como pueden ser aquellos con hemocromatosis, anemia hemolítica o aplasia eritrocitaria. En caso de falla en la respuesta al tratamiento deben investigarse otras causas de anemia. No conviene usar el hierro durante el primer trimestre del embarazo.

Interacciones

El hierro forma quelatos con las tetraciclinas, disminuyéndose la absorción de ambos. La absorción del hierro es menor en presencia de penicilamina y antiácidos. Por potenciales interacciones conviene separar en varias horas la administración de hierro y otros fármacos.

Contraindicaciones

Hipersensibilidad al hierro. Pacientes con sobrecarga de hierro.

Riesgo en el embarazo

No hay riesgo para el feto en el primer trimestre del embarazo. No hay pruebas de riesgo en los últimos trimestres del embarazo.
Publicidad
Publicidad

iVademecum © 2016 - 2024.

Políticas de Privacidad
Disponible en Google Play